Secrets.

Soy yo.
No hacen falta preguntas, ya comprendí que no me comprendes, así que, sin ánimo de lucro, aquí dejo las respuestas, date por aludido.
Me enamoré. Y no me dí cuenta asta un tiempo después. Qué se le va a hacer... Y no lo negaré nunca más. O al menos intento no hacerlo. ¡A lo hecho pecho! Era mi... Mejor no.
Estábamos sentadas en el poyete del descampado junto al insti, recuerdo margaritas, mi balón de baloncesto (firmado por amigos) se me resbalaba de los pies. Cayó por la cuesta y los niños se apropiaron de él.
Aquella tarde en el centro comercial entré al baño de tios, compré condones, fuimos al baño de tías, abrimos los condones y los chupamos. No sabían a los supuestos plátanos y fresas... ¡Qué fiasco! Dinero mal gastano. Ahí me quedó bastante claro que jamás nunca haría una felación con condón.
En mi casa. Yo loquita, creyéndome enamorada. Una cantando. Otra intentando calmarme. Y aquella grabando. ¡Qué locura! Salgo en YouTube diciendo ser zoofílica y lesbiana. Mentirijillas treceañeras.
En el aula de audiovisuales. Una de ella hizo novillos y se colocó a mis pies, escondidita. No me quedé con la trama de la peli pues un inglesito estaba diciéndole a mi jamaicano favorito que me gustaba. UST ladies and gentlemen!
Sardinas en la playa. Una ternura inesperada. Juego con las palas. Agua congelada. Pizza. Qué sé yo qué más.
En aquel inmueble abandonado. Paquete recién comprado. ¡Jo! Qué asco... De todas maneras, fui parte de este "lo terminamos".
Un bonito doble sentido para un consentido final.

Comentarios